Julio Ramón Ribeyro nació el 31 de agosto de 1929, bajo el signo de Virgo. La astrología describe a los virginianos como seres analíticos, reservados y observadores, cualidades que se reflejan con claridad en la vida y obra del gran narrador peruano.
Algunas características de Virgo que coinciden con la personalidad y la escritura de Ribeyro son:
- Analíticos y observadores: atentos a los detalles de la vida cotidiana. Ribeyro retrató escenas simples —un barrio, un gesto, una conversación trivial— que en su pluma se transformaban en reflejos de la condición humana.
- Introvertidos y reservados: Virgo suele evitar los reflectores. Ribeyro fue un escritor discreto, amante de la vida sencilla y de la intimidad antes que del protagonismo.
- Melancólicos y críticos: su literatura transmite desencanto, ironía y ternura hacia los personajes marginales, mostrando la belleza en las derrotas cotidianas.
- Autocríticos e inseguros: Ribeyro confesaba sentirse un “segundón” frente a otros escritores, pero esa exigencia personal lo llevó a pulir una prosa sobria, clara y honesta.
- Humildes y sencillos: Virgo busca lo esencial. En Ribeyro, esto se refleja en una narrativa despojada de adornos innecesarios, fiel a la verdad de sus personajes.
En conclusión, el perfil de Virgo encaja perfectamente con Julio Ramón Ribeyro:
Un escritor reflexivo, perfeccionista y profundamente humano, capaz de transformar los pequeños gestos en universos narrativos.