24 Frases de Rayuela de Julio Cortázar - Julio Ramón Ribeyro

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14.11.22

24 Frases de Rayuela de Julio Cortázar




1.
En cada mujer parecida a vos se agolpaba como un silencio ensordecedor, una pausa filosa y cristalina que acababa por derrumbarse tristemente, como un paraguas mojado que se cierra.


2.
Convencida como yo de que un encuentro casual era lo menos casual en nuestras vidas.


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3.
Como no sabías disimular me di cuenta en seguida que para verte como yo quería era necesario empezar por cerrar los ojos.


4.
No estábamos enamorados, hacíamos el amor con un virtuosismo desapegado y crítico.


5.
Caíamos en silencios terribles y la espuma de los vasos de cerveza se iba poniendo como estopa, se entibiaba y contraía mientras nos mirábamos y sentíamos que eso era el tiempo.


6.
Nos queríamos en una dialéctica de imán y limadura, de ataque y defensa, de pelota y pared.


7.
Aunque hiciéramos tantas veces el amor, la felicidad tenía que ser otra cosa, algo quizá más triste que esta paz y este placer, un aire como de unicornio o isla, una caída interminable en la inmovilidad.


8.
Vos sos como un testigo, sos el que va al museo y mira los cuadros. Quiero decir que los cuadros están ahí y vos en el museo, cerca y lejos al mismo tiempo. Yo soy un cuadro.

9.
Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella.


10.
Y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.


11.
No puede ser que estemos aquí para no poder ser.


12.
Cada vez que respiro es como si el vacío me entrara en el pecho donde ya no estás.


13.
Hay ausencias que representan un verdadero triunfo.


14.
Sólo viviendo absurdamente se podría romper alguna vez este absurdo infinito.


15.
Mirá, un mate es como un punto y aparte. Uno lo toma y después se puede empezar un nuevo párrafo.


16.
El problema de la realidad no se enfrenta con suspiros.


17.
Inercia. Todo dura siempre un poco más de lo que debería.


18.
Ni a vos te tengo ya, porque estaba bien decidido que tenía que perderte (ni siquiera perderte, antes hubiera tenido que ganarte).


19.
A mí en realidad no me gustó nunca la rayuela. Pero no me fabriques una de tus teorías de posesión, yo no soy el zombie de nadie.


20.
Qué hacer cuando lo que se quiere y lo que debes hacer no es lo mismo.


21.
Todo lo que se escribe en estos tiempos y que vale la pena leer está orientado hacia la nostalgia.


22.
La risa de ella sola ha cavado más túneles útiles que todas las lágrimas de la tierra.


23.
Cuántas veces me pregunto si esto no es más que escritura, en un tiempo en que corremos al engaño entre ecuaciones infalibles y máquinas de conformismos.


24.
Porque si la venganza es un arte, sus formas buscarán necesariamente las circunvoluciones que la vuelvan más sutilmente bella.

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